Se trata del cuarto descenso interanual consecutivo, asociado al deterioro del poder de compra de los hogares y a una fecha que, en la actualidad, no logra impulsar de manera significativa el consumo minorista.
El ticket promedio alcanzó los $ 37.124, lo que representa un incremento nominal del 9,8% frente a los $ 33.819 registrados en 2024. Sin embargo, al ajustar por inflación, la variación real es negativa en 16,7%, lo que indica que las familias destinaron menos dinero que el año pasado para celebrar el Día de la Madre. A pesar de que el 83,5% de los comercios aplicó descuentos, promociones y cuotas sin interés, las ventas no lograron repuntar en términos reales. La amplia adopción de estrategias comerciales –como reintegros bancarios, ofertas cruzadas y financiación extendida– permitió sostener el movimiento en algunos rubros, pero sin traducirse en un aumento del consumo efectivo.
El resultado refleja una pérdida general de poder adquisitivo y un contexto en el que el gasto de los hogares continúa condicionado por la restricción del ingreso real. Los comercios buscaron atraer demanda a través de precios promocionales, pero el público priorizó productos de menor valor y compras más planificadas.
A precios constantes, la comparación entre el Día de la Madre 2024 y 2025 muestra que, aunque los valores nominales subieron, en términos reales la mayoría de los rubros registró caídas. Los electrodomésticos y artículos para el hogar retrocedieron un 8,4% real, reflejando que el consumo de bienes durables sigue siendo uno de los más afectados por la pérdida de poder adquisitivo. Calzado y marroquinería se mantuvo prácticamente estable, con una leve mejora del 1,8%, mientras que indumentaria cayó 5,3%, evidenciando que, pese a las promociones, el público optó por regalos de menor valor o directamente redujo el gasto.
El rubro tecnológico fue el único que logró crecer en términos reales, con un aumento del 15,7%, impulsado por el recambio de dispositivos y las facilidades de financiación. En cambio, cosmética y perfumería mostró la baja más marcada, con una contracción del 24,2% real, mientras que librería retrocedió 1,7%.
De los seis rubros relevados, cinco registraron caídas interanuales en sus ventas. La mayor retracción ocurrió en Librería que se retrajeron 6,3% frente al año pasado. El único que creció fue Electrodomésticos, artefactos del hogar y equipos de audio y video (+0,6% anual).