En relación con el reciente anuncio presidencial sobre la reducción de los derechos de importación para teléfonos celulares, las Cámaras de Comercio de Ushuaia y de Río Grande expresaron que “esta decisión, orientada a disminuir la inflación y facilitar el acceso a la tecnología para los consumidores, constituye un esfuerzo por dinamizar la economía nacional. Sin embargo, su implementación genera preocupaciones significativas en TDF, en particular para la industria electrónica”. Por ese motivo solicitan un espacio de diálogo entre todos los sectores involucrados.
En el documento conjunto, expresan: “La reducción de aranceles afecta directamente la competitividad de las empresas fueguinas, poniendo en riesgo cientos de puestos de trabajo y comprometiendo la continuidad de inversiones estratégicas en la provincia.
Desde nuestras entidades reafirmamos nuestro compromiso con el desarrollo sostenible de la región y la defensa de los intereses de las empresas y trabajadores locales. Reconocemos la necesidad de adaptarnos a un contexto económico cambiante, pero consideramos fundamental que esta apertura comercial esté acompañada de medidas complementarias que mitiguen los efectos negativos sobre nuestra industria.
Por ello, hacemos un llamado a la apertura urgente de un espacio de diálogo que involucre al Gobierno nacional, el Gobierno provincial, las cámaras empresariales y los sindicatos. Creemos que es posible encontrar soluciones que equilibren la integración al mercado global con la protección de la producción y el empleo local, asegurando un futuro próspero para Tierra del Fuego y para todo el país”.