Blanco instó al Gobierno Nacional a no conceder el plácet diplomático y reclamó que la Cancillería se pronuncie oficialmente.
“Lamelas no viene a representar a su país, viene a intervenir en el nuestro. Habló de frenar la corrupción, condicionar relaciones con China, asegurar el triunfo de Milei en las elecciones y garantizar que Cristina Kirchner reciba ‘la justicia que se merece’. Eso no es diplomacia: es colonialismo disfrazado”, afirmó el senador.
“No soy partidario ni del actual presidente ni de la expresidenta, pero de ahí a aceptar que un embajador extranjero venga a definir nuestra política interna y externa hay un abismo moral y patriótico que no pienso cruzar”, añadió.
“Desde Tierra del Fuego, donde se libra todos los días la causa de Malvinas y donde la soberanía no es un discurso sino una realidad concreta, no podemos permitir semejante atropello”.
“Lo único que falta es que el presidente Milei le ponga un moño al país para entregárselo al Señor Trump a través de sus personeros, a cambio de vaya a saber qué favores políticos”, finalizó el senador fueguino.